Tabacalera Sarandí emitió un comunicado expresando su satisfacción por la derogación parcial de la Ley 27430, conocida como Ley Massalin, la cual consideran perjudicial para su subsistencia. La empresa ha estado en litigio desde 2018 argumentando que esta ley otorga una posición dominante en el mercado tabacalero argentino a la multinacional Massalin (Philip Morris).
La compañía celebró la media sanción del paquete fiscal presentado por el Poder Ejecutivo, que incluyó la derogación parcial de la Ley Massalin. Sin embargo, criticó la inclusión de un artículo en la Ley Bases que establece un control de precios diferenciado para Massalin y British American Tobacco (B.A.T.) en más de 100.000 kioscos del país. Tabacalera Sarandí argumenta que esta medida solo beneficia a las multinacionales, ya que estas pagan contratos millonarios a los puntos de venta, en su mayoría estaciones de servicio, y utilizan la publicidad como pretexto para mantener precios bajos y eludir impuestos.
Además, denunciaron que antes de la Ley Massalin, la tasa de impuestos al tabaco era del 75%, pero el gobierno la redujo a 70% para las empresas monopólicas, lo que les significó un ahorro de casi USD 1.000.000.000 en impuestos. Criticaron la similitud en la forma de legislar este artículo con la aprobación de la Ley Massalin en 2017.