Perdió su casa en un incendio y no la dejaron hablar con Mussi

Hace días, una familia con hijos discapacitados sufrió el incendio de su casa ubicada en la avenida Oeste entre 356 y 357, de Ranelagh. El incidente provocó la pérdida material total. Estefanía Alderete, una de las hijas de la familia, comentó que los bomberos “tardaron en venir de 40 minutos a una hora”.

Tras este hecho, los vecinos propusieron por redes sociales acercarse a la inauguración de la plaza Luis Giuliani realizada el fin de semana pasado en la misma localidad, para poder solicitar al Intendente allí presente la habilitación del cuartel de Bomberos de Ranelagh. “Tuvimos que esperar a que llegaran los bomberos de Berazategui, Hudson y Gutiérrez. Necesitamos que nuestros bomberos puedan salir a trabajar. Esto es una vergüenza”, comunicó una vecina.

Estefanía comentó que su hermana, Soledad, estuvo presente en la inauguración: “Ella se acercó a uno de los de seguridad de Mussi, le dijo si podíamos hablar con el Intendente porque se nos prendió fuego la casa y le contestó que no, que nadie podía acercarse a él. Mi hermana les dijo que va a hacer una carta y la va a llevar a la Municipalidad para poder hablar con el Intendente, porque no nos pueden dejar en la calle”.

“Vinieron de la Municipalidad y nos dejaron colchones, zapatillas, frazadas, pero me dijeron que material para construir no nos podían dar porque no tenemos la escritura de la casa. ¿De qué escritura me hablan si perdimos todo?”, agrega Estefanía.

Walter Pereyra, el Jefe del cuartel de Bomberos Voluntarios de Ranelagh, aguarda la habilitación de este espacio hace dos años, confirmó que en esta localidad sucedieron “trece incendios en casi tres meses”, y presentó a las autoridades un informe que demuestra que los bomberos aledaños demoran en llegar a Ranelagh, como mínimo, 25 minutos. “En ese tiempo ya no queda nada”, comentó Pereyra.