La CNEA impulsa la ciencia del futuro con una supercomputadora

La División Teoría del Departamento de Física de la Materia Condensada de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) está abriendo nuevas fronteras en la investigación científica con el poder de una supercomputadora. Esta división se enfoca en la ciencia básica y utiliza esta herramienta para resolver preguntas fundamentales y abordar desafíos cruciales en áreas como la física de materiales, la termodinámica y la química cuántica.

El equipo, liderado por la doctora en Física Verónica Vildosola, se centra en investigar propiedades físicas y físicoquímicas de materiales y sistemas de interés tanto para la CNEA como para el avance de la ciencia básica en general. Utilizan una supercomputadora de 50 nodos y 1.000 núcleos capaz de realizar 10.000 millones de operaciones por segundo, lo que les permite llevar a cabo complejas simulaciones y análisis.

Entre los proyectos en los que están trabajando se encuentran:

  • Flujo de líquidos y gotas en la nano-escala: Estudian cómo los líquidos se comportan en canales de escala nano revestidos por polímeros, con aplicaciones en microfluídica y diagnóstico médico.
  • Separación isotópica de litio: Investigan métodos electroquímicos para separar los isótopos del litio, con potenciales aplicaciones en tecnología nuclear y medicina.
  • Transferencia de calor a escala nanoscópica: Analizan la transferencia de calor en interfaces líquido-vapor, con el objetivo de mejorar la extracción de calor en dispositivos electrónicos y sistemas de generación de energía.
  • Propiedades electrónicas de materiales topológicos: Estudian materiales con propiedades topológicas para su posible aplicación en computación cuántica y desarrollo de dispositivos electrónicos.
  • Electrorreducción del dióxido de carbono: Investigan la conversión de CO2 en compuestos utilizables como combustibles o materias primas, utilizando celdas electroquímicas.

Estos proyectos representan solo una muestra del vasto potencial de la investigación que se está llevando a cabo en la CNEA. La utilización de la supercomputadora, bautizada como Sol 67, permite a los investigadores realizar simulaciones detalladas y avanzar en el conocimiento científico con una precisión sin precedentes.